Pensé que lo nuestro era sólo un juego,
Al parecer amiga, creo te enganché,
no intentaba prender tu poderoso fuego,
¿Cómo puedo extinguir esto que inicié?
Amiga mía, al bailar sentí tu entrega
Esos ritmos provocantes al danzar,
las dudas aumentaron al callar,
\"un, dos, tres\"; Eso ya no era un vals.
Hoy te trato amiga de evitar,
pues tu arrojo aviva mis sentidos,
el tener tu cuerpo junto al mío,
no debo estallar y menos levitar.
No te pertenezco, hay alguien más,
dobla tu sentido hacia otro juego,
busca al amor que te pueda amar,
amiga, no me llames, ¡te lo ruego!
Andrés Romo
REGISTRO PÚBLICO DEL DERECHO DE AUTOR No. 03-2013-112210443900-14