Tu calor rodeo mi cuerpo
Abrigándome en la noche,
Que nos cubrió de silencio
Para escuchar ese rose,
De tus labios en mi cuello
Enloqueciendo mi alma,
Que te deseó por completo
Mientras que tú me besabas.
Tomé tu boca tierna,
Con mis dedos perturbados
Por sentir esa piel tibia
En frío de mis manos.
Que al minuto de tocarte,
Pronto calor tomaron,
Pues que tus besos arden
Por ser tan apasionados.
Hoy la luna nos envidia,
Nos observa entre otros astros,
Y no entiende como juntos
Nuestros cuerpos fusionamos,
Olvidándonos del frío,
Que nos cubre sin tocarnos.
En simbiosis perfecta,
Cara a cara nos quedamos,
¡Que la noche no termine!,
¡Que no me dejen tus labios!