Que a mis manos fue a caer, Era pequeño y suave, Lo mismo que tú al nacer. Despues de que tu nacieras
del osito me olvide, eras tan tierno, tan dulce... que al peluche arrincone, se sintió triste, olvidado... pero no lo supe ver.
El tiempo paso y tu creciste, del oso no me acorde, pero un día entre trastos viejos aquel peluche encontré, estaba sucio, descosido... entonces lo recordé. Lo lave con mucho esmero, con cuidado lo arregle, ¡mira, es ese osito pequeño que anoche te regale!. 20-12-1990Quiero contarte la historia
De un osito de peluche