UN CAMINO PARA AMBOS.
Será tarea del destino o tal vez de uno mismo, el llegar a cruzar nuestros caminos. Tendrán su misión las rosas para aromar en aquel día y la labor de los zorzales será el cantar de amanecida.
De seguro, yo te propondré un beso y es posible que tú quieras provocarlo, pero yo te propondré un beso tan amplio como largo.
Habrá camino para ambos. Habrá camino que conduzca o nos invite a caminarlo.
Habrá pasos, habrá huellas y un camino para ambos.
Nos diremos nuestros nombres. Nos veremos a los ojos y en la línea de horizonte, nos veremos a nosotros.
No ha de ser tan fácil pero tampoco será frágil. Una vez, estando unidos, lo importante es el camino.
A nosotros se nos va a llenar el alma de colores nunca vistos. Nos va a encontrar el alba con el sol comprometido.
Me dirás lo que te digo y el poema que hoy te escribo colgará del firmamento.
Otro nuevo sentimiento va a llenarnos a los dos y el calor de nuestros cuerpos va a llevarnos al amor.
Lo nuestro, de concretarse, será un camino largo. Sin embargo, yo estoy dispuesto a caminarlo.