Jose Luis Posa Lozano

VENDIMIA

Hay poemas como vinos,
poemas rojos de sangre,
negros como los augurios,
dulces, amargos, claretes
que pasan, pero no queman,
ligeros y refrescantes,
 
vinos jóvenes y frescos,
añejos y de barrica,
otros apenas son mosto
que se quedó en el lagar
después de pisar las uvas
cantar, beber y follar
celebrando la vendimia
que tanto se hizo rogar.
 
Hay poemas gran reserva
en las bodegas del alma,
antiguos como la vida,
rancios como la esperanza
que hierven como aguardiente
y te emborrachan el alma
 
y hay poemas espumosos
como el cava o el champan
que tras años en bodega
en silencio y soledad
estallan como las tracas
entre espumas de alegría
rebosando nuestras copas
para libar y brindar
celebrando el nuevo día,
que tanto tardó en llegar,
ese amor desesperado
que al fin se hizo realidad,
 
vino, amor y poesía
¡no nos hagáis esperar,
porque el verano se acaba
y el invierno acecha ya!