Una a una caen las letras que yacen en el papel,
y enamoran a la tinta, que toma sabor a miel,
y describen tu silueta, para dar un punto fiel,
al amor que nace eterno, erizándote la piel.
No se puede describir con frases un sentimiento,
y al más intenso poema lo dejarás sin aliento,
porque dentro de tu alma no existen los pensamientos;
solo hay huellas que desgarran;… y en carne viva te siento.
Una a una las palabras resuenan en una prosa,
y fallan al describir, el perfume de una rosa;
en vano intentan plasmar el dolor que te destroza,
y rotundo es su fracaso, cuando te dicen hermosa.