Ojos que miran los rincones de mi alma
que me esclavizan a libertad de la tuya
enlazando mi aliento con la profundidad de tus sueños
mirándome eternamente, dejando mis anhelos intactos
Ojos densos de inquietudes y ansias
como vela emancipada portándome a mares infinitos.
Ojos sin pasado, descansado en mi pecho,
convirtiendo mis manos en ramas de árbol
donde anidan tus sueños y renacen los míos
Ojos adheridos a la desnudez de los senos
procurando alimento como arroyo de vida
cerrando los párpados para vencer los temores
sobre la mansedumbre del pecho
que es la cuna y el cielo
Ojos de noche que se acercan al alba
Descubriendo la luz de las rosas y el campo
Coincidiendo tu brillo con la aurora y la estrella
Con la visión peregrina de un mañana de ensueño
Ojos abiertos como mis hombros bajo los tuyos
estrechando en abrazos la ilusión y el gozo
sosteniendo el aire en susurros y besos
contemplando la vida en tus pupilas de luna.