En el vasto y oscuro firmamento,
Un ser primigenio se alza en su esencia,
Engalanado con etérea vestidura,
Desplegando un aura de misterio y presencia.
Efervescente fulgor del océano cósmico,
Pululan estrellas en danza hipnótica,
Mientras el éter susurra en susurros místicos,
Secretos antiguos, sabiduría simbólica.
En las profundidades del universo abisal,
El infinito se revela en su grandeza,
Con su aliento estelar y su luz celestial,
La existencia se despliega en su sutileza.
Un torbellino de pensamientos suscita,
La contemplación del fluir de los tiempos,
Enlazando presente y pasado, oh, insigne cita,
La evolución del ser, en complejos abismos.
El ser, ente augusto de dualidad innata,
Consciente de su finitud y trascendencia,
Anhela comprender la esencia del cosmos,
Enigma ancestral de perenne existencia.
Palabras arcanas brotan de labios sabios,
Paladeadas por mentes sedientas de saber,
En versos intrincados, legado de seres bravos,
La poesía trasciende el tiempo, sin fenecer.