Me quedo con ella,
porque está loca.
Porque es compañera,
consejera y aprendiz
en una sola persona.
Porque con un beso
en la nariz
me desnuda antes
de sacarme la ropa.
Me quedo con ella,
porque me ama
con toda el alma,
porque me sonríe
con toda la boca.
Porque aprendió
de sus derrotas,
y sin juzgar nada
disfruta lo que me toca.
Me quedo con ella:
Porque no se compara
con ninguna otra.
Porque es hermosa
preciosa como diosa.
Por eso y porque está loca,
a mi medida loca.