De luciérnagas preciosas
la gran noche se atavía
despertando algarabía
con sus luces prodigiosas.
Con estelas luminosas
que semejan poesía;
de luciérnagas preciosas
la gran noche se atavía.
Sus centellas primorosas
brindan cielos de placía;
y con galas asombrosas,
la gran noche se atavía
de luciérnagas preciosas.
Autor: Aníbal Rodríguez.