Fugaz.
Fuiste amor de un día….
de esos amores apresurados…
que llegan con el equipaje lleno de afectos,
con las ganas contenidas…
y los deseos reservados,
con el ansia inquieta,
y el ímpetu exagerado,
sedientos de cariño,
abrazados a la ilusión…de despertar de la larga espera,
tratando de disuadir melancolías arraigadas,
confiados en volar muy alto…a los confines de la gloria…
lejos del pasado.
Tan Breve…
fuiste amor de un día…
de esos amores precipitados,
con el corazón deshecho… pero aún esperanzado,
y con la mirada irradiando un sublime brillo…que cautiva y persuade,
con los ojos transmitiendo una dulzura impetuosa,
y a la vez fantaseando espejismos.
Fugaz,
tan efímero como el sueño,
que se desconecta del contexto por un momento…
y luego se evapora…repentinamente…
como un espectro…en la espesura de la realidad.
Amores así…
desesperados por volver a creer en su pasión,
por intentar una vez más…brotar como la primavera,
entusiasmados en pintar el amanecer de un nuevo día,
queriendo tocar el cielo …con besos de cerezo,
y con las manos rebosadas de caricias.
Intermitente y veloz…aventurero,
un amor bohemio…de una noche loca…
de una madrugada de éxtasis,
quizá un sentimiento pasajero…y discontinuo.
Amor de un día…sin tiempo,
sin dar espacio a la desconfianza,
sin pensar mucho en el futuro,
desafiando arriesgadamente el hoy,
poniendo el entusiasmo a prueba,
apostándole a todo.
Amor de un día…
demasiado momentáneo como para sostenerlo…
pero indudablemente intenso como para desconocerlo.
Amor de un día…que desaparece en el silencio…
y mueres inevitablemente en la inconstancia.
Amor de un día…
que, aunque efímero…perecedero y temporal…
pero amor al final…
Amor inolvidable.
Amor de un día… inolvidable.