Madre mía
Tus manos heridas cuidan mi alma;
Con llantos sublimes, ella la calma;
Ocultando dolores cuando camina;
Respirando para pulir la disciplina…
Para recordar consejos en el alba;
Toca mi mano, cuando ella acaba;
Cuando sus batallas son poéticas;
Épicas, que escriben sus historias…
Narrando minutos del quien oye;
Con gestos para que no desmaye;
Para trazar radiografías de nuevo;
En semblantes, del quien yo llevo…
Puede anunciar; lo malo y bueno;
Palpando, su amor incondicional;
Ella separa del corazón el veneno;
La maldad que tuerce el terminal…
Va luchando en oraciones del día;
¡Madre mía! Tolera mi infortunio;
Que es una decisión, talvez tardía;
Mas tus caricias calman el diluvio…
Cuando coges mi pecho y abrazas;
Diciéndome ¡Hijo Mío! Has comido;
¿Tienes sed?, entonces has venido;
Para hablarte al oído, bajo tus alas…
Bajo la luna puedo relatar historias;
Conversar tu vida en estos detalles;
Para que regreses y me maquilles;
Al compás de las voces y aventuras…
Mi alma encuentra paz y paciencia
Escribiendo notas musicales al oído
De quien sangra y entrega su amor
Cuando te escucho en mi presencia…
¡Madre mía! Te quiero mucho….
VERSOS DE DANTE ALIGHERI
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