Annabeth Aparicio

Ven, mi lucero

Ven, brilla, como hermoso lucero

cual cadena de estrellas de Orión

brilla como anillo, obra de herrero

cual si fuese, para Salomón.

 

Ven como un lucero, encendido

brillando, cual diamante puro

como corona de oro bruñido

cual si fuese, para Arturo.

 

Entre las luces de un ardid

brilla con los rayos matutinos

como cetro de los reyes divinos

cual si fuese, para David.

 

Como un lucero, ojo de lubricán

cual metal fundido en hechura

para una legendaria armadura

cual si fuese, para Genghis Khan.

 

Ven palpitando, oh, lucero mío

junto a Venus, diosa radiante,

eres mi amor, lucero brillante,

y Venus, amor de Rubén Darío.