Santiago B

¿A dónde van los poemas?

Esos vestigios que el tiempo no se lleva
una dulce condena
leerlos, reeleerlos, deshacerlos en cada letra
¿A dónde van?¿A Dónde irán?
A qué rincones de soledades insondables pararán
esos estribillos del tiempo
pruebas fidedignas de su relatividad

De los espejos
brotan las sienes de sus rasgos
comprometiéndome con un yo que no soy
Que nunca he querido ser

Pero están allí
ellos
poemas absurdos que me miran perplejos