La confusión ya no es más una excusa
Las golondrinas extienden sus picos y raíces
La sal se hace grande entre las dunas
Y nos vemos en las ciudades de mil ojos
En mi pecho se guarda la noción pretérita
En mi pecho se ha inventado un regazo
Que cuida de su aurora para un poco de tu tacto
En las esquinas se siembra una intriga soterrada
Vamos por los torrentes de luz
Luz en los días, luz en las noches, luz en el silencio
Sabemos que es posible delegar nuestro cariño
Sabemos del ritmo y de la obligación de los esquemas
Entonces nos preguntamos por el camino del exceso
Por la condición de los arácnidos
Y de todo lo que se extiende en otros ojos
Deseo un mundo donde no tenga remedio
Se han alumbrado los elementos
Se ha condicionado el rumbo de las \"eses\" y de las \"yes\"
Y calculamos dónde se puede sucumbir sin que sea necesario
Pudimos concretar la voluntad del otro día y del presente
Y somos la verdad de un pedido hecho a mano
Y somos la apertura de una aurora que no cambia
Todos los días sin cesar
Todos los días cesando