Quédate con él.
Quédate así una y mil veces;
dale el lugar que te pide, mi bien:
no mientas diciendo que lo aborreces.
Que te diga un vacío \"te amo\",
que te bese de inercia la boca,
que te ocupe por mera costumbre;
al final, eso es lo que buscas.
Sus proyectos a medio camino,
sus cartas recién arrancadas,
su vaga presencia en tu cuerpo;
su tibio cobijo en tu cama.
Con su historia de amor a distancia
y sus recuerdos muy bien arraigados;
quédate con todo eso, mi vida:
quédate viviendo de su pasado.
Quédate a medias porque eso mereces,
no es necesario un amor de adeveras;
quédate con tu felicidad fingida,
quédate así causando mi pena.
Quédate con tu felicidad fingida;
cuando es voluntaria no sabe a condena.