No me arrepiento
de haberte conocido,
ni de amarte tanto.
Si eres la ilusión,
que en mi corazón hizo nido,
si eres la bendición;
que me llegó en el momento exacto.
No me arrepiento,
porque no te esperaba.
No me arrepiento,
porque te añoraba.
Si algún día, me llego arrepentir,
que no sea; por amarte a ti.
Si algún día, me lamento,
que no sea; porque te quiero.