Lo que siempre hay,
hambre, angustia, desdicha
lo que nunca basta,
lo que siempre sobra,
aquello que nadie dice
pues nadie le quiere oir
¿como es que le ocultan?
ni aquel que haya le revela,
apenas encontrado por uno
otro le vuelve a esconder,
un eterno descender
Lo que siempre hay aparenta, decrece.
Tan fugaz, esfumado y nebuloso
consta cercano y se acerca
cegando esta casi ausente conciencia
lentamente, un segundero,
inaudible, una interminable pausa
tal como en tu desprecio,
como mi indiferencia,
el unico aplauso lejano
aquel chiflido en la espera
de la obra que nadie gozó
y del evento que ha sucedido
Lo que siempre hubo,
lo que siempre habrá
esta avidez de consertirte,
aquel impulso de salir volando
su risa o tu llanto,
el sólo dar y
el no querer