Sergio DeBaires

Voyeur

Una mano que vuela los dibujos
como un ave dorada por el fuego
dibujando en su nido, casi un juego,
aquelarres de yemas, besos brujos.

Un gemido acunado en tibios flujos
de mareas de piel, abierto el pliego
a la licitación del amor ciego;
falso vino robado a los orujos.


¿Será la soledad sólo una excusa
del espejo rotado que te hechiza?
¿Ó será sólo urgencia lo que eriza
el árido pezón bajo la blusa?

Sólo sé que por hoy en tu escenario
actúo de voyeur; tal vez de otario.