Pyck05

DIJE TU NOMBRE...

Dije tu nombre
y el eco respondió
muy suavemente.

Estaba solo
en una bella cumbre
de la montaña.

¡Qué gran paisaje
desde ella se veía
y contemplaba!

Grité tu nombre
de nuevo, con más fuerza,
porque te amaba.

Y respondieron
los labios, invisibles
desde los valles.

Eran tus labios
trayendo hacia los míos
un dulce beso.

Cerré los ojos
pensando en tu figura
y en tus caricias.

Estabas lejos
y cerca, en el recuerdo,
que iba conmigo.

Y te abracé,
buscando en el silencio
tu cuerpo amado.

Rafael Sánchez Ortega ©
19/05/23