Poemita
Yo soy el poeta más bueno del mundo,
porque yo no cobro mis poemas,
ni le pongo precio a mis palabras;
todo lo que digo, ya lo dijeron otros,
pero eso no me detiene, ni me espanta,
porque... talvez el tono, quizá mi acento,
u otra cosa que ignoro, hace ver diferente
lo que en realidad, ya lo dijeron otros.
Ahora, lo que digo es, que tienes bonitos ojos,
que cuando caminas, danza, el viento a tu alrededor,
que tu voz es melodiosa y dulcemente clara,
y lo mejor de todo, que me sabes amar.
Porque haber decidido amarme, te hace bella
y exclusiva, como el cielo del mar,
como el perfume de una flor perfumada,
que se evapora en medio de la nada
y comienza a soñar.
Aborrezco los sueldos y las limosnas,
los bonos y el participio del cobro,
igual que los chinos, rechazo la propina,
porque me ofende, me reduce y me inclina.
Yo soy el poeta más bueno del mundo
y el más orgulloso, también.