Atractivas se ofrecen las mañanas
con el renacer de la primavera,
la triste flor que su gota no espera
se empina al sol con renovadas ganas.
Y las cosas por las que más te afanas
para tu salud será la primera:
patear el trigo maduro en la era
y rebosar el cuenco de manzanas.
Retornas como la abeja a la flor
a recuperar su perdida miel
y con ella embalsamar el dolor
Desatado por el destino cruel
que puso en jaque a su mundo de amor
y ahora le ha devuelto su nivel.
Edel@vateignoto
23-05-2023