Hoy he visto un jilguero
Hoy por la mañana cuando caminaba
¡Qué humilde ternura!
Libre y dichoso
Entre quietud y movimiento
Respiraba el aire de los pulmones del cielo.
Y entre una mata de amor saltaba.
En el quicio chiquito
Del corazón incoloro del viento.
Y estando a su recitar
Volaba con rapidez a su cantar,
A la magia de su trinar.
Existo porque existes avecilla
En tu fuente de vida.
Por eso sé que el mundo maravilla.
Hoy he visto un jilguero
Y sé que estoy vivo
Tras escuchar su concierto.