jennvecino
Mi sustento
- Quise apagar el mundo y solo conseguí incendiarlo
- No percibí la realidad de mis temores
- Ni fui capaz de sostener la mirada ante mi desolado juicio
- Creí vencer todo ello que me consumía
- Caminé… corrí
- Probé por un segundo el sabor de la victoria
- Cuán infeliz es el hombre cuando construye castillos de la nada
- Y es el todo quien viene y lo destruye
- Lo miserable de soñar
- Es despertar con las manos vacías
- Y estoy aquí en la misma esquina abrazando el “supuesto “ de mi que ya ni reconozco
- Inventando vidas que no existen
- Y escapo,
- Por un segundo
- De esta realidad que me agobia
- De este ahora frío y calculador
- Entonces tropiezo
- Con mi voz, de nuevo
- Gritando en silencio, me levanto Y comienzo de nuevo a existir