La cama me llama y me atrae la melodía de aquella canción que me recuerda, que no quiero olvidarte.
La medianoche me habla de tu cara, tus ojos que los míos tanto aman.
La cama, la noche y la canción sonando en esta habitación. Oh sí, recuerdos que guardo en el corazón.
Sonrisa reflejada, hermosa postal congelada en la memoria de una cursi que se castiga añorándote.
Y la oscuridad en la cama que me atrapa.
Tu voz suena en mi cabeza, tus bobadas que se extrañan.
Y yo queriendo confesar que te amo como nadie mas lo hará. Pero qué importa, si no te puedo alcanzar.