Siento tus pasos
en medio del delirio
y mi locura.
Es en la noche
que cierra mis pupilas
y me estremecen.
Aún los recuerdo
llegando presurosos
hasta mi lado.
Éramos jóvenes,
teníamos proyectos
y nos amábamos.
Hoy yo te amo
y pienso que han cambiado
tus sentimientos.
Me siento solo,
me invade la tristeza
y no te veo.
Busco en las sombras
y encuentro telarañas
y no la luz.
Te necesito,
te grito en la distancia,
y tú lo sabes.
Ven a mi lado,
preciso tu sonrisa
y tus palabras.
De todas formas,
si quieres y no puedes,
te entendería.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/05/23