Incluso cuando espero
siento la duda perenne
asirse a las realidades,
es una sorpresa incontrolable,
probablemente, son los trozos sin digerir
de un espacio
que nadie entiende
y que cose
las retorcidas tesis
de mi subconsciente.
Me pierdo en la dificultad
de los acontecimientos,
dejándome aliviar
por cada cápsula que traga
mi lógica del entender,
entender en las travesías
de los discursos ajenos
cuando rompen las nadas impolutas
que con firmeza arraigaron en mí siempre,
tertulias interminablemente,
solitarias,
en pasillos mojados
de silencios,
temerosos vacíos
y clandestinos atajos
que furtivos se hacen oirm
en la humildad generosa
de los que me logran entender.
A veces…
siempre el maldito a veces…
que como un aleatorio constante
marida las leyes de un tiempo
que intenta ganar su sustancia
arrebatando futuro
aún presente marginal
e inconcluso
macerándose en la posibilidad,
a veces,
incluso cuando espero
tengo la sensación
de faltar donde a mí, me esperan
o en un contraluz de soberbia
dejar la impronta
de quien expandirse no se deja
y con un sutil silencio
se aleja.
📷Adrián Borda.