Yo y el Alma en Secreto,
y la que Sueña
con ese Camino de Sangre...
Yo, los Huesos, la Carne,
el Embriago en Cenizas
que se Pierden entre
Velas Calladas...
Yo, la Soledad Amada
y el Silencio...
Yo, la Estirpada Memoria
que Embriaga
el Sol de un Poniente,
y el Metálico Símbolo...
Yo y la Dispersa Sombra,
que se Clavan
en el Ascético Puerto
que Nutre esa Sola Palabra...
Yo y el Tiempo
que Muerden
en Fatiga Oculta
la Otredad Vacía
de tus Llagas...
Yo, el más Incógnito Ser
que se Dispersa,
entre Muros de Piedras,
entre Laberintos y Túneles
que Escupen las Proas
de tus Barcas
Ancladas...
(Patricia)