Anne Black

Aunque ya te he perdido...

Aún me pregunto cómo ser mas fuerte que mis pensamientos infieles que te pertenecen desde hace tantos años. 

 

Creo que es imposible quitar de mis venas este amor inmenso que has hecho nacer con solo una mirada. 

 

No se borra tu nombre, perdóname. No obstante desde que te has marchado no logro dejarte ir. Te has clavado tan profundo que me cuesta seguir sin ti. 

 

Tu rostro refleja la dulzura e inmadurez, y ternura que me envolvieron para siempre. Porque mientras tu solo me recuerdas, yo te recuerdo con el mismo amor de ayer. 

 

Miro mi reloj que marca la medianoche, suspiro y te busco desesperadamente para decirte que de ti necesito. 

 

Besos, abrazos, caricias. Súplicas y confesiones que sean suficientes para escaparnos juntos. 

 

Aún me pregunto por qué el destino nos jugo una mala pasada. Si yo anhelaba casarme contigo. 

 

Aún no me resigno a perderte, aunque ya te he perdido. Aún no te arranco, aunque le jure amor eterno a otro. 

 

Y aunque sea una tontería que te quiera con todas mis fuerzas sin tenerte, jamás podré arrancarte.