Gustavo Leni

AGUA Y TIERRA

Nosotros somos como una novela sin terminar

o un poema sin concluir;

siempre tenemos un renglón que agregar,

otro capítulo por descubrir y vivir,

un verso nuevo que recitar.

 

No hay forma de término.

No podemos incluir nuestro amor

a un sistema establecido y rígido,

rutinario,

preconcebido a la repetición

empujado al altar de sacrificios

y condenado a morir muerto.

 

Nosotros estamos en constante movimiento.

Nosotros somos nuestra propia fuente de alimento.

 

Nosotros somos el eje de nuestro planeta.

Nosotros somos agua y tierra.

 

Yo te persigo siempre

desnudo de posesiones,

sólo me visto con mis ideales

y aun cuando más fe tengo en ellos,

prefiero desnudarme completamente

y perseguirte,

rogarte,

esperarte,

amarte y después

dormirme

y dormido,

soñarte.