El Sol Nunca Fenece
Tus lengüetas de fuego me lamen en silencio,
en un ardor sublime que mi sopor levanta.
Dime mujer, te ruego, que yo te reverencio,
si tu amor me redime de lo que tu alma encanta.
No dejaré que el llanto me opaque tu recuerdo,
ni de aguas caudalosas tu mano no me libre.
Dentro tu dulce canto soy un aria y me pierdo,
escribiéndote glosas hambriento como un tigre.
Asido a tu almohada tropiezo entre las nubes,
por una de ella subes como una sutil hada.
Llévame a tu ensenada donde bañas querubes,
en sus celestes clubes, y amar no cuesta nada.
Bésame con locura nuestro amor lo merece,
si la pasión se mece por hebras de dulzura.
Tu miel todo lo cura, las penumbras decrece,
y el sol nunca fenece... ¡Cuando el amor perdura!
Tommy Duque
May 16 2023
Riverview, Michigan.
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