Tarde o temprano tendrás que pagar por tu amor
Por tanto daño que me hiciste sin importarte
Siempre he vivido convencida que allá está Dios
Y es el quien cobra en este mundo lo que se hace
Te entregué todo sin medir nunca las consecuencias
Enamorada sola estaba nada veía
Pensaba que en tu vida estaba también la mía
Pero me equivoqué y cuando desperté ya el alma me dolía
Que nada pude hacer