Cuando sonríe el profundo abismo,
entre cuatro paredes padece
lo que la sociedad no pertenece;
es sonrisa cruel de optimismo.
La ventana al mundo es espejismo;
sonries sin gracia y compromiso
como el que cambia sin previo aviso
sus costumbres y pensamientos;
derroches de disculpas y \"lo siento\"
que un momento la mente deshizo;
sigue el caudal frío y tormentoso
que conduce a aguas cálidas y serenas,
aparentan oasis hermosos,
son tormentas bajo la luna llena.