Dormita el pueblo bajo quietas nubes, retrasan y retrasan un sopor de grises tendiendo sombras de encajes a las formas mismas de su silueta en inminencia aún de aventurarse...
Es cierto bajo esta luz casi lechosa flotan y se mezclan los solares de casas sobre las calles solas en una fantasía irradiada toda de infancia pura.
Ah, las tardes otoñales allá, ah, las cosas, sólo las cosas y las almas... bajo las nubes serenas todavía del sueño de los campos del paisaje que no puedes olvidar aun si lo olvidaras el olvido no se sentiría casi otro sería el paisaje en la misma línea pura
Ore
Acuarela Autor Ore