¿Vale la pena
hacer versos en diferentes pociones
de diferentes acciones, en diferentes medidas
y estúpidas relaciones
que nos dejan en suspenso?
¿vale la pena, realmente, escribir poemas
de unos, de los otros, de los aquellos y aquellas?
de cualquiera- ¿vale la pena hacer poemas de amor
a las mujeres y canciones, y viajar a las estrellas
como un romántico sueña,
y como todo lo hermoso que siempre
había existido?
Sí; en este mundo de infamias
lo que quiere las mujeres
no son versos, pero los hombres tampoco,
lo que quieren es lo mismo; el deseo
en las mujeres, el enredo, el desconcierto,
el dinero sucio o limpio, da lo mismo
porque el que tiene plata, platica,
y el que no, pues se mastica
en oraciones, también el trasero grita,
a veces más que los diablos del infierno,
de las rosas pálidas del desencanto,
la frivolidad resuena en hambre
y chelines en las bolsas, cada vez más
la putería asombra en las parejas de amigos.
Cada vez es más tu enemigo, y en la sombra
nos persigue, por insolentes caminos.
es estúpido escribir versos de amor
y amistad en una traicionera
vida, sin encantos, sin romance, con amorosas
hipocresías y múltiples desencantos?
-en verdad ¿vale la pena?