Te amo tanto y no se cómo dejar de hacerlo
Te extraño con el alma echa pedazos
Apenas me sostengo, apenas entiendo lo que hablan
Estoy cegado y por ratos me quedo mudo
Si cierro los ojos te encuentro bajo la oscuridad
Si me quedo en silencio, en mi mente resuena tu voz
Cuando por las mañanas me sorprende tu recuerdo
Que al estar ausente desordena mis sentidos.
Cuando mi piel rosa la sábanas, extraño tus manos
Cuando el calor me despera, extraño el frío de tus pies.
La desgracia de haberte perdido de la noche a la mañana.
Me tienen sometido en este interminable sufrimiento
Te amo tanto y no quiero dejar de hacerlo
Te extraño con el alma deseando tu regreso.