el brujo de letziaga

¡El Rey que mata! Juan Carlos de España.

Hoy podía haber escrito un poema cualquiera que hubiera ingeniado esta mañana de martes, pero se me antoja muy difícil hacerlo tras la indignación que me inunda y donde mi adrelanina se me escapa a borbotones tras leer la noticia de el gran batacazo real.


El país de los españoles -yo no lo soy- en recesión económica con la friolera de más de cinco millones de parados, donde miles de familias son expulsadas de su domicilio por no poder atender sus créditos bancarios, sus hipotecas, vemos que hay gentuza que se dedica a exportar dinero a paraísos fiscales y que los que más ejemplo tienen que dar son los que más esquilman a la sociedad. Por cierto, una sociedad que aguanta estoicamente con calma y mucha paciencia la poca ley existente, la cantidad de incompetentes, de corruptos y parásitos que están hundiendo a su país España. Hay personas que no les llega a fin de mes, que no les llega para pagar un alquiler, e incluso para comer ¿Hasta cuando señores? Deberíamos darnos cuenta que no hay pan para tanto chorizo.
Mi capacidad de asombro no tiene límites cuando me desayuno estos días con la noticia de que el monarca de los españoles, un auténtico caradura se va a cazar elefantes al centro de África con los impuestos que pagamos todos. ¡Qué vergüenza! ¡Qué animal es este monarca!


¿Alguien se ha puesto a pensar sobre la inteligencia que tiene un elefante?. Los elefantes viven en grupos, en familia, se ayudan los unos a los otros, cuando un elefante siente que va a morir, se retira de su grupo y estos luego van a hacerle como un acto de entierro. Los elefantes son muy inteligentes, son seres vivos que sienten y padecen como las personas.


Es indignante que en el Siglo XXI siga habiendo gente que para divertirse tenga que matar a un pobre animal. Le han preguntado al pobre animal si quiere morir de ese modo? Por que no se dedica este tipo de gente a correr, nadar, hacer bici, o incluso, jugar al dominó o a las cartas como hacemos muchos? Indignante y de vergüenza matar por matar, que triste afición y que agonía para esos pobres animales que no hacen nada malo, simplemente intentar sobrevivir. ¿Sabéis que las personas son los únicos animales que matan para divertirse? ¿Sabéis que los animales solo matan para comer y subsistir? Y resulta que vemos como una matanza de las que hace este hombre ronda sobre los SESENTA mil euros, más gastos de desplazamiento, hoteles, séquito etc...


Qué fácil es matar. Un tiro y ya está... pagar una pasta por el placer de matar y hacerse una foto...y ver como se desploman toneladas de ingenuidad y pureza, me indigna y más cuando se sabe que los elefantes son seres muy inteligentes, que sienten tristeza cuando pierden a un miembro de la familia, incluso reconocen sus restos y... que pueden llegar a vivir 100 años ¿Quién es el sinvergüenza este para cargarse una vida así? Acaso se comió el elefante después, lo necesitaba para alimentarse? Esto si que va en contra de mis principios morales. Por supuesto el dinero gastado en ello... no está justificado bajo ningún concepto evidentemente.

 

 

 

 

España tiene un rey que pongo adrede en minúsculas que vive “a cuerpo de rey”, y nunca mejor dicha la frase que le viene al dedillo. Le podría desear un “pronto restablecimiento” que es un tópico al uso de buena educación y buenas costumbres, pero no lo haré, porque a lo mejor algún elefante peligraría y prefiero que el rey siga con su “mala pata”, esa pata mala que le ha hecho que se vaya al puñetero suelo tantas veces, ya sea en la nieve o matando elefantes. ¡Qué animal eres Juan Carlos! El rey que mata.