En el lienzo yace un cuerpo vacío,
desnudo, mudo en su pintura soy.
Así me ven, eso es lo que sienten,
más soy más que un deseo sin voz.
No busco ser anhelada ni gustar,
no vivo para agradar y complacer.
La juventud efímera se desvanece,
este cuerpo no será eterno al amanecer.
mi esencia trasciende a lo físico y carnal.
Mi valía no radica en lo que ven tus ojos,
sino en el amor propio que alcanzo a abrazar.
Dejaré que el tiempo pinte sus trazos,
no me definirán años ni apariencias,
pues soy mucho más que esta envoltura.