Interior
En el interior está tu mundo,
no sólo dejado un epitafio,
y tan abrupta la ruta,
y de un sólo zafio,
es el desconcertado inocuo,
y trascendental como real,
está en el interior de un sarcófago,
cuando vago en el trance de lo perfecto,
pero, dejo un epitafio,
y que dice ¨No te olvidaré jamás¨,
pero, yo como lector leo,
¨no te dejaré nada jamás¨,
y así fue no me dejó nada más que deudas…
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez
EMYZAG