Asaltos y asesinatos
nos rodean por doquier,
los hambrientos de poder
entre fatuos alegatos;
traficantes insensatos,
expandiendo ese placer
que destruye nuestro ser
con edenes siempre fatuos;
los placeres pasajeros,
la ambición y vana envidia,
mentirosos noticieros
deformando las noticias,
periodistas verdaderos
son víctimas de homicidas:
oh destino tan incierto
hacia dónde te encaminas...