Entre la bruma
destaca tu figura
en la alameda.
Figuras grises
con árboles y calles
cobran sentido.
Ya sale el sol
y anuncia la mañana
su colorido.
Rasga la bruma,
que entrega tu figura
a mis pupilas.
Bajas tranquila
camino del trabajo
con tu sonrisa.
Yo te saludo
y voy hasta tu lado
en suave vuelo.
Tú me sonríes,
se animan tus pupilas
y soy feliz.
¡Qué bello encuentro
nos narras, mariposa,
en este día!
Y es que la escena,
plasmada en estos versos,
tiene ternura.
Es como un sueño,
de niños y mayores
en un poema.
¿Quieres ser niño?...
No dejes que tus sueños
se pierdan nunca..
Rafael Sánchez Ortega ©
19/06/23