Lucy Quaglia
Y vendrĂ¡
Y vendrá la gente a casa
vestida de terciopelo,
acordeones y gitarras
cantando una chacarera
entre ilusiones de paz
y maldiciones caseras.
Y vendrá la gente mala,
la de siempre, la más buena,
la que no importa que venga
porque no espero por ella,
la que quisiera entenderla
si mi corazón contento
late con graciosa fuerza
para enconrar la salida
a esta vida soñolienta.
Y vendrán a mi velorio
día y noche, sin la tregua
de esperar mis ansiedades
a que no me dejen muerta
si es que hay algo que no tengo
para contar la experiencia.