Pampa Dormida-Luis

PLEGARIA DE DOMINGO - POR LOS VERDADEROS LÍDERES

Creo que la Lectura de la Palabra de hoy es lo más acertado sobre lo que nos está sucediendo.

Jesús (Líder indiscutible) es bien claro:

 *No tengáis miedo a los hombres, porque nada hay cubierto que no llegue a descubrirse; nada hay escondido que no llegue a saberse. Lo que os digo de noche decidlo en pleno día, y lo que escuchéis al oído pregonadlo desde la azotea. No tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. No, temed al que puede destruir con el fuego alma y cuerpo \"

El asesinato con tintes políticos y/o de poder desmesurado, de una mujer inocente de todo, ocurrido en la provincia de Chaco, como también el intento por parte de grupos que pretenden instalar el miedo, la corrupción y la violencia por propios intereses de destituir a un dirigente que está demostrando ser de lo más sobresaliente o “potable” como líder y quien hoy se desempeña como gobernador de la provincia de Jujuy, en nuestro País, son sólo dos muestras de lo que vemos a diario.

Las peleas sin cuartel en todo el espectro de la dirigencia política, no sólo entre las diferentes propuestas (si es que las hay) y los adversarios, por ocupar un mísero lugar en los listados de poder, nos llevan a pensar, sin dudas, que no existe un verdadero líder.

A Jesús le costó ser profeta en su propia tierra.

Pero, ¿qué es “ser líder”?

A mi entender y sin ninguna duda el líder es aquel o aquella quien debe desempeñarse en el servicio a los otros en lugar de buscar su propio interés.

Concluyo en que el liderazgo no está relacionado con el poder, sino con la autoridad, entendiendo esto como “ el arte de conseguir que otros hagan lo que ha de hacerse basándose en la ejemplaridad del líder y en su autoridad moral \".

Liderar no implica solo ser una buena persona y hacer lo correcto; es necesario hacer las cosas bien, ser efectivo, conseguir resultados, crear valor. En definitiva, conseguir los objetivos de una organización, institución o grupo al que pertenecen mejorandose a uno mismo y a los que trabajan en ella.

Y me pregunto: Dónde están nuestros líderes?

A quienes pretenden instalarse ante la opinión pública y/o sus votantes futuros no queda ninguna duda que están muy lejos de ser lo que los define como tal.

Me cuesta entender que mientras la inseguridad y la economía no nos da tregua, ellos sólo buscan culpas de sus propias negligencias o ineptitudes, en el oponente.

Nos confunden desde sus bancas con discursos contrapuestos y como si fueran una jauría hambrienta, tironean entre ladridos y gruñidos, un mísero pedazo de carne.

Cuanto más levantan la voz, más profundo es el insulto hacia el oponente.

Para luego terminar pactando alianzas espúreas.

Ya nos hemos acostumbrado a sus insultos y al desprecio por el otro.

No hay un líder sano con el cual identificarse.

La calle es un reflejo de esa polarización.

Por eso simplemente hoy quisiera pedirte Padre que me permitas seguir creyendo en que se puede tener empatía con los demás.

Que nos permitas escuchar y sentir el dolor del otro sin que ello demuestre debilidad.

Que podemos consensuar con el otro lejos de agresiones, trabajando con compasión por el débil y necesitado, pero con tenacidad y decisión.

Te pido que nos permitas volver a creer en que la popularidad y el liderazgo deben basarse en las virtudes y en la educación.

Muéstranos a aquel referente compasivo que se comprometa con la responsabilidad de ofrecernos un mañana mejor, de esperanza.

No debiéramos conformarnos con menos.

Te pido que nos saques de esta rebeldía y nos des la claridad de pensamiento para en lo inmediato encontrar esa excepción del profeta en la propia tierra mientras retomamos aquel camino del que nunca debimos separarnos como sociedad, la de educar a los futuros líderes.

Educar a nuestros jóvenes para que en el futuro puedan manifestar su potencial de liderazgo, recuperando la educación en valores que parecen haber caído en desuso, tales como el esfuerzo, el servicio, la magnanimidad o la solidaridad, y no permitir que desde los estrados de poder se nos quiera hacer creer que el mérito y el esfuerzo no sirven para nada.

Buen Domingo.

LHS