1 Pecado después de la 1era Tentación
Amarte después de la tentación,
es envenenar el alma de fríos,
y haber caído entre las garras del amor,
y haber sido el peor de los momentos,
no es haber amado con amor,
1 pecado después de la 1era tentación,
es enredar el ocaso e ir lejos de aquí,
y con el sol marcharme lejos,
hasta que el destino sea fabuloso,
por 1 pecado después de la 1era tentación,
es querer amarte con un amargo dolor,
en el alma, sí, en el alma,
con una luz opaca,
que después de ver el cielo,
se enreda el tiempo y más el amor en el corazón…
Me Quedo Aquí VIII
Como raudo y veloz,
Va mi semental a correr,
Hacia lo más perdido del horizonte,
Y va en busca de un jinete,
En locura y en tortura,
Pero, va raudo y veloz,
Es el semental cuando me quedo aquí,
Es el semental que me da tiempo y más cielo,
Cuando corre como la velocidad,
Va con rumbo incierto,
Es mi semental y mi manera,
Va sin dirección hacia el desafío,
Inerte hacia el buen camino,
Y me quedo aquí,
Como semental que va sin fulgor,
Atroz como el venidero porvenir,
Y como la gruta abrupta de ruta senda,
Va mi semental como buscando una salida,
Pero, su relincho y su coz,
Da su insignificante y atroz salida,
Cuando va sin miedos ni temor,
Hacia el desafío muerto,
Y con un sólo instante,
Es benevolencias y bondad lo que dejó,
Un cuerpo cansado por el tiempo,
Y como un jinete y jockey,
Va mi cadena de enredos,
Y como gríngolas en los ojos,
Hacia una sola dirección,
Pero, mi unidad queda en desierto,
Y mi caballo correr lejos va sin rumbo,
Raudo y veloz,
Como un tiempo en que el ocaso deja marchar al sol,
Y como una era es sólo un desconcierto,
Y queda como el desafío inerte,
De quedar como el semental solo,
Y raudo y veloz,
Como un cielo con nubes claras de algodón,
Me quedo aquí,
Pues, en mi mundo sólo arde el fuego que quema,
Pero, el agua es elemento que apaga al fuego,
Y el sol es como la luz,
Pero, existe agua por demás,
Así es Dios, cuando sólo me quedo aquí,
Como pensando e imaginando en que el tiempo es atroz,
Como un semental en un delirio,
Y es como un desafío el frío,
Que me da el invierno,
Lo lamento mucho,
Pues, el raudo y veloz,
Consagra el desafío,
Y el camino sólo por una vez,
Cuando ocurre el penitente destino,
A complementar la ira,
Cuando en la calma se intensifica,
La buena bondad dejando un sólo delirio,
La fe y la benevolencias innata,
Cuando en mi cuerpo cercenado,
Está la prueba más eficaz y contundente,
De la ira que llevan mis entrañas,
Y tan rojizas como el atardecer nuestro,
Cuando en el campo y en la tragedia,
Se intensifica el más hálito álgido,
En poder creer sobre el paisaje en correr raudo y veloz,
Como el tiempo y como perdidas horas,
En qué el desastre cae como cielo de cristal,
Cuando en el afán de un semental,
Corre veloz como raudo es,
Cuando el tiempo es como el desastre,
Y no lo expresó cómo debe ser,
Sino como Dios lo dispuso así,
Y yo puedo correr como raudo y veloz,
Pero, el tiempo a veces gana más que mis preceptos,
Cuando soy semental como rauda y veloz,
Pero, mi detrimento queda asustado de espantos,
Cuando con las gríngolas en mis ojos,
Se asustan como es un miedo y un temor,
Y como un semental va mi rumbo y mi dirección,
Y como semental corriendo en velocidad,
Va mi tiempo y mis horas inertes,
Inmóviles como transmutadas,
Como un ocaso cuando llega rápida la noche,
Cuando ocurre el transitorio tiempo,
Y como se corre raudo y veloz,
Y como un triste lamento va mi vida,
A ser como lo que quiera yo,
Y no como lo que quiera usted,
Un ser transmutado por dónde sólo sale de su boca la palabra nada,
Cuando no se debe tentar a Dios en tierra extraña,
Si de su boca como en la locura,
Salen las letras n a d a,
Será que no has visto a mi semental raudo y veloz como el tiempo,
Y si me quedo aquí,
Es porque aquí estoy yo y no otra,
La que no ven ni tus narices,
Porque tus ojos ciegos son…
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez
EMYZAG