Desde Que Te Perdí
Las peleas se volvieron un túnel sin salida,
se tornaron costumbre, caímos en la rebeldía,
a veces aceptabas que me quedará con tu sonrisa fingida,
pues tenías cosas que hacer al otro día.
Y no es que seamos unos niños, ni estamos en la pubertad,
pero al parecer en nuestra relación, nunca tuviste libertad,
de tanta discusión en ocasiones ya no esperabas mi llegada,
querías escapar, manejabas lejos, sin que te importará nada.
Quizá es cierto, aún no me dejas de amar,
pero la vida sigue, y sé que continúas sonriendo sin cesar,
tienes un estupendo trabajo y con bastante estabilidad,
de verdad te deseo que pronto escales tu añorada escala social.
Todo está siendo diferente desde que se acabó,
cada uno en su camino… por ahí,
tal vez me digas que no es lo mismo ya sin mí,
pero es posible que ahora seas mucho más feliz.
Desde que te perdí, desde que me perdiste...
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Autor: César Alanís Morales