Querer es un sentimiento de ensueño,
un amor que envuelve,
es vivir en realidad un sueño;
y por lo qué a mí concierne.
Querer es hacerle el amor a los besos
de esa persona que quieres.
Es disfrutar el proceso
de colonizar pensamientos;
es disfrutar el momento.
Querer es como la aritmética,
se suman múltiples satisfacciones,
se multiplican sentimientos
y eleva tus emociones
con exactas proporciones
basadas en tus fundamentos.
Por eso quererte a ti
es sentir la fuerza del amor,
es desear el tiempo no vaya deprisa
cuando contempló tu sonrisa.
Es otorgarle a los miedos valor
para con valentía luchar por tu amor;
es dejar a tus manos divagar
en la totalidad de mi piel,
es sentir ese placer que embriaga
de ternura.
Tu llegada, fue casi una locura
de improviso, cual hechizo
la poción de tu pasión
con tan solo una fracción
dio razón a mi corazón
para quererte mucho.
Quererte a ti me hace querer
descifrar tu enigma,
y en tu amor, encontrar la fórmula
la cifra perfecta al calcular
tus formas de amar.
Quiero encontrar un lugar
donde podamos escapar
al soñar,
un mundo perfecto rodeado
de afecto donde el único concepto
sea amar amor y amarnos.
Donde seamos felices
y cada noche, me duerma pensando en ti,
y que al soñarte no quiera despertar
y sin palabras poder expresar,
que el amor siempre será parte de mí
con solo tus labios besar.
Quererte a ti es más de lo que merezco
es disfrutar de lo que me hace feliz,
soñarte, mientras te miro eso te ofrezco
y llevar en mi corazón en tu ausencia
nuestros recuerdos bonitos.
Quererte a ti es resiliencia
es vivir sin límites, sin miedos.
Por eso está noche lluviosa quiero
llegar a tu puerta;
poner esa canción que nos gusta
y bailar sin parar, despacio sin espacio
entre nosotros.
Y que no importe que nos moje la lluvia
hasta humedecer nuestros cuerpos.