NARIUT ORIAJ

A MI SALVADOR

Justo y a tiempo, a mi vida llegaste.

Era el día de mi muerte, pero me salvaste.

Sellaste mi triste corazón con tu dulce amor,

Ungiste mis heridas con tu aceite mi Señor;

Salvaste mi alma con tu perdón y redención.

 

Manantiales de alegría brotaron en mi desierto,

Inundaste con tus aguas mi corazón sediento.

 

Señor, a tu lado, por siempre quiero estar,

A tus pies caer rendido para adorar.

Lirio de los valles, Rosa de Sarón,

Varón de dolores, Cordero Santo y León.

 

Admirable, Dios fuerte, príncipe de paz;

El camino, la vida y la verdad.

Oh Jesús, bendito sea tu nombre,

Rey de reyes y Señor de Señores