Matias 01

De que estas hecha…

¿De que estas hecha, tú?

¡Y que importa!

Hay un rincón donde me he ido

para guardar tu nombre,

para remover la tierra y morirme un poco

junto a tu corazón ausente.

 

¿De que estas hecha, tú?

¡Que me importa!

Si tus senos son dulces de frutas

que caben en mi boca

y tu sexo la flor herida

en que pierdo todo mi sufrimiento.

 

¡Ay noche! Déjame pasar la puerta,

déjame beber el vino que me aguarda

mientras se beben mi sangre

las sanguijuelas del amor;

¡Ay luna! Deja de alumbrarme

las heridas

que se mueven como peces del dolor.