Todo va dando vueltas
sin necesidad de una redondez,
todo gira a su manera
sin necesidad de un timonel:
todo lo pasado se mezcla
y nada se puede esconder,
no hay necesidad de recetas
ni un papel para envolver;
las líneas que han sido rectas
ahora tiene curvas por doquier.
No hacen falta luces nuevas
si todo aquí se va a oscurecer,
para que contar las estrellas
que pronto van a desaparecer.
Ya no hay un mero dolor
en las palabras que están por caer,
ni hay misterio en las sombras
que nos dejan de pertenecer,
solo un conjunto de fragmentos
de algo que fue algo alguna vez,
no hay música ni aciertos
ni tenemos nada que perder
si nunca hemos comprendido
que todo estaba perdido al nacer,
que todo, todo se termina
y que todo gira también,
que todo volverá al polvo
de donde venimos sin un porqué.
Y mientras el tiempo sigue su camino
todo lo frágil se va a romper
y se romperán nuestras vidas
no habrá ni un Dios ni fe
tan solo una puerta abierta
¡Y un universo viéndonos caer!