El amor que soñé en mis albores
no es amor romántico
no es amor estético
es aceptación de lo que es,
de lo que será y ha sido;
es el amor que no se ha ido;
el amor que siempre espera;
es fiel y no se desespera
a pesar de la enfermedad,
la ausencia y precariedad;
es el amor que perdura
que no pierde la cordura
y se sacrifica hasta el final
que te hace bien y no mal.